La URBA enojada con la UAR

16 de diciembre de 2007

La Unión de Rugby de Buenos Aires (URBA) envió una dura carta a la Unión Argentina de Rugby (UAR), en la que remarcó las diferencias de intereses que mantiene con la más alta institución del deporte en el país, además de solicitar elecciones y acusar a los actuales dirigentes de la UAR de permanecer en sus cargos cuando sus mandatos ya han expirado.

Quizá el dato más fuerte es que la URBA solicita al presidente de la UAR que se celebre una asamblea durante el mes de diciembre para "cumplir con el obligado recambio de autoridades" para definir el "cese en la administración y conducción" de las actuales autoridades.

La categórica carta, firmada por el secretario Carlos Righi y el presidente Néstor Galán, llegó como respuesta a un pedido de reunión de la UAR, que buscaba juntar a las Asociaciones de rugby del país en un hotel, para determinar un estatuto que rija el rugby en el país.

La URBA rechazó esa convocatoria y esgrimió sus razones. Entre otras cosas, aseguró que el mandato de Alejandro Risler, presidente de la entidad "al igual que el de otros dirigentes que parecen haber olvidado el objetivo de su designación, se encuentra vencido desde el 30/9/07".

Lo que se solicita por parte de la URBA es lo siguiente

1) Que la UAR convoque a la brevedad una asamblea  ordinaria o extraordinaria, lo que es indiferente- para la obligada renovación parcial de Consejeros.

2) Que suspenda la concreción de la onerosa e inútil "invitación" cursada al Hotel Sheraton de Pilar. 3) Que deje sin efecto la convocatoria a la Asamblea extraordinaria prevista pare el 28 de diciembre próximo, hasta tanto se promueva un mecanismo regular, lógico y positivo para analizar la necesidad y el contenido de las eventuales reformas que el estatuto de la UAR, requiere para insertar a la representación nacional del rugby argentino.

Además, la carta intima a Risler a consultar a otras Uniones su acuerdo con las posibles reuniones para modificaciones estatutarias. Y concluye con una frase fuerte, también dirigda al presidente de la UAR: "Sin duda que su eventual negativa, a esta altura de los acontecimientos, impedirá pensar en la sinceridad de sus motivaciones y procederes".